sábado, 12 de enero de 2013

ÚLTIMO ASALTO


Este relato surgió en la habitación de un hospital. Hace dos años y medio, mientras España ganaba el Mundial de fútbol, allí estaba mi padre ingresado. En la cama de al lado, un viejecito parecía a punto de despedirse de esta vida. Su hijo le daba agua de un vaso por medio de una pajita y le decía: “Chupa, chupa más fuerte”.

Entonces se me ocurrió contar la vida de una persona a través de cinco episodios en la que alguien decía esa misma frase. Al recién nacido, al niño que se hacía hermano de sangre de su amigo, al joven que probaba las drogas, al adulto que practicaba sexo y al anciano del hospital que veía su vida resumida ante unos ojos que se apagan. “ Ginebra, semen, heroína, sangre, una calavera, un disparo”.

La chispa aparece en cualquier lugar, solo hay que estar atento a las historias que se mueven por ahí, a las que se ocultan en el lugar más insospechado. Es bonito imaginar, darle vueltas a las ideas y a las palabras por la cabeza. A veces se atraviesan un poco y hay que meterse los dedos en la garganta. Otras, ni por ésas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario